"No confias en la gente", me lo dijo una vieja que era profe mia 10 minutos antes de echarme del colegio. No le dije nada, por que era cierto.
El unico que escucho lo que me dijo esa vieja fue el Cabezon, cuando era un gordito bajito, con una buena dosis de espinillas en la cara.
Me miro con su cara llena de pus y me pego una palmada en la espalda.

-Vamoh a loh columpioh, Guru-me dijo, mientras se rascaba la cabeza llena de piojos.

Nadie me decia "guru", me lo habia puesto una pendejita que me gustaba y el Cabezon pa hueviarme me empezo a decir asi.
No dejaba que nadie mas me dijera asi.

Nos sentamos en la placita y el Cabezon me invito a mi primer cigarro.
Teniamos 13 años y fue la unica vez que alguien me ha visto llorar.

-Mi mama me va a retar Pali, hueon-Yo le decia Pali, porque sabia que tambien le molestaba.
-Tranquilo hermano, si no pasa ná, le digo a mi primo que te consiga pega en el mercado, alla trabaja el loco y conoce hartos viejos que no se pueden los cajones con fruta, ahi la haci toa.
-Guena Pali, ahi alguna huea vamoh a inventar...

Ahora no fumo, cada vez que lo hago, me acuerdo de ese momento.

Cuando llegue a la casa, mi mama me saco la mierda. No fue la primera, ni la ultima vez, pero si la que mas me dolio.
Le falle a la vieja.

Cuando sali a la cancha, todos los cabros sabian que me habian echado del colegio. Me metieron en el equipo altiro, y todos me daban pases. Yo no sabia jugar a la pelota.

El Cabezon arreglo eso, yo sabia.

Con el tiempo el Cabezon y yo aprendimos que en la vida habian mas cosas que jugar a la pelota y la escuela. Saliamos al Bella a tirarnos minas, y trabajabamos construyendo edificios pa los cuicos en el centro, pa tener pa comprarnos ropa decente y unos paraguas.

20 años despues, tengo 43 años y estoy apuntando a mi mejor amigo con una pistola que me mando la tia.

-SALE POH INDIO HUEON!!!-me grita con la escopeta en la mano.

No he vivido 43 años por salir cuando un hueon tiene una escopeta en la mano, aunque sea mi mejor amigo.

-"Disparai primero, preguntai despues"-decia la Tia cuando me enseño a usar las pistolas.
La vieja nunca me falla.

Llevo un mes encerrado en la casucha, y nadie escepto la vieja y la Coni sabian donde estaba.
Ese maricon que me quiere cagar se ha comprado a medio Chile pa poder matarme.
No se la voy a hacer tan facil.

Apunto.

Casi nunca fallo.
Ahora tampoco.

El cabezon se cae y el loco que anda con el sale corriendo.
Corro hacia el mientras las viejas se esconden en las casas porque saben que viene show ahora.


No confiai en la gente guru...
Fue lo ultimo que dijo.

Salgo de la villa y nadie me dice nada.

Miro hacia atras y veo a la Tia, me grita que me vaya.
Atras de ella esta la mama del Cabezon.
Llora, pero no me dice nada.

Compro un cigarro antes de pasar por los columpios de la placita.

Me cae una lagrima.
Ojala nadie me vea.

Continua.